¿Qué pasa con los derechos de autor?

Hoy me gustaría hablar de una boda. Se que a primeras este no seria el sitio correcto para hablar de ello pero ésta se ha convertido gracias a Internet y a su contenido en el video más visto de España y de Latinoamérica. Probablemente ya sabrán que estoy hablando de la archivista boda de José Carlos y Vanesa en Sevilla.

Para situarnos un poco dejen que les cuente de qué se trata. La novia, cantante de un coro, decide sorprender al novio el día de su boda cantándole una canción en la iglesia. El video lo colgó ella misma en Internet para distribuirlo entre amigas y invitados de la boda de una forma sencilla y de coste cero. El caso es que pasados unos días el video empezó a viralizarse y el poder que Internet otorga a todos los usuarios para ser preceptores de cualquier cosa con su circulo social hizo que se distribuyera por todas partes y alcanzara más de 2 millones de visitas.

A partir de la popularización en la Red del video empezaron a llamar la atención de otros medios de comunicación como la televisión, la radio o la prensa. La pareja de novios empezó a asistir a programas tanto de radio como televisión y a atender entrevistas de diarios. El tema central era la canción cantada por la novia y la repercusión que ha tenido esta en todos los medios. Por supuesto, como en otros videos ya populares, empezaron a aparecer videos dónde se imitaba a la pareja, se bailaba la canción o foros dónde se hablaba acerca de ello e incluso se pedía que ¡la novia sacase un disco para comprarlo!.

Mi pregunta en este caso es, ¿Y los derechos de autor? Se que es un caso extraño (pero como este hay muchos), puesto que cantar una canción en una boda o hacer sonar su música no implica tener que pagar ningún tipo de derecho pero ¿Qué pasa cuando la canción llega a más de 2 millones de personas sólo por Internet y a muchas más por otros medios? ¿Esta Internet matando los derechos de autor? ¿Debería haber derechos de autor? ¿Cuándo se cuelga algo en Internet, tierra de nadie, todo vale?

Las respuestas a todo ello son complicadas. Aunque los novios no sabían de su repercusión mediática por haber cantado en su boda, ¿Nuria Fergó, la cantante, tendría derecho a quejarse por la interpretación y divulgación de un tema suyo a gran escala y sin permiso?. Si La Caixa pagó 70 millones de pesetas a Sting por los derechos de Every breath you take, ¿Deberían los novios pagar, por imprudentes, a Nuria Fergó los derechos que le corresponden?. ¿Sale, en realidad, Nuria Fergó beneficiada de la popularización de la canción? ¿Venderá más discos?

Por lo visto, en Internet no hay derechos que valgan si no hay una retribución económica premeditada. Las casualidades se perdonan, aunque estas sean muy rentables posteriormente.
Otra casualidad? la novia cantaba mejor que la mismísima cantante y el disco ya se está esperando. ¡Que vivan los novios!